Diario de una Rookie Vet

Diario de una Rookie Vet
El verano de 2012 "Diario de una Rookie Vet" actualizó día a día desde Kathmandú, Nepal... Ahora, 9 estudiantes de Veterinaria viven su propia aventura en Ichangunarayan trabajando como veterinarios voluntarios! ¡No te lo pierdas! (clicka la imagen para formar parte de esta pequeña aventura...)

miércoles, 24 de agosto de 2011

"El 32% de los estudiantes de Medicina Veterinaria muestran signos de depresión"



"... frente a un 23% de los estudiandes de Medicina Humana"
Lo que llevamos diciendo en este santo blog toda la vida, por fin alguien lo ha estudiado con sus cifras y sus datos empíricos.
Os dejo aquí un corto articulo en Español y más abajo, para los ofuscados de verdad, un articulo más extenso en inglés.

Gracias Mac Hafen, de la Universidad Estatal de Kansas, por darnos una justificacion científica de estar como una puta chota.


"Dicen que no hay nada que más moleste a un veterinario que el hecho de que le digan que es un médico frustrado. Pero quizás haya algo peor: que alguien piense que se ha dedicado a la salud animal por no soportar la idea de perder a un paciente humano. El “cobarde, gallinaSDRq, versión estudiantes de ciencias.
Ahora, un estudio de la Universidad Estatal de Kansas ofrece un argumento incontestable contra esa tesis. Los futuros veterinarios se deprimen mucho más (una media de nueve puntos) que los médicos del mañana. ¿Por qué Mac Hafen, terapeuta y profesor en la citada universidad, se decidió a comparar la depresión entre estos dos colectivos? Lo explica en la revista más idónea para ello: Journal of Veterinary Medicine Education (“la revista de educación en medicina veterinaria”). Según Hafen, hasta la fecha nadie había evaluado la salud mental de los que llegarán a ser veterinarios, al contrario de las decenas de investigaciones que se han ocupado del cerebro del futuro médico. Tras investigar de forma anónima a sus estudiantes, y ver que el 32% mostraba síntomas de depresión –frente al 23% de los pupilos de Medicina–, el autor del estudio se preguntó la razón de esta diferencia y apuntó varios motivos.
En primer lugar, los estudiantes de Veterinaria tienen que enfrentarse a situaciones estresantes vetadas al médico por una cuestión legal, como la posibilidad de realizar una eutanasia a un paciente terminal. El segundo, al menos en la mayoría de los países, no podrá proponer acabar con la vida de uno de sus enfermos. Pero además, mientras que el médico sólo estudia su disciplina en humanos, el veterinario tiene que lidiar con decenas de especies. ¡Qué estrés!"

http://blogs.publico.es/libre/2011/08/24/la-depresion-oculta-del-veterinario/#textoCom

Articulo en inglés: http://www.eurekalert.org/pub_releases/2011-07/ksu-rfv072811.php

sábado, 13 de agosto de 2011



Hoy hace un año del día más largo de mi vida. Mañana hará un año que se fueron 12 años de mi vida de un plumazo.


Mañana hará un año que estamos un poco más solos. Y como si el jodido hipocampo lo tuviese apuntado en un calentadio, te acuerdas de las cosas casi como si volvieran a pasar. Y lloras igual que llorabas hace un año.


Lo veo todos los días, muchas veces que tenemos las manos atadas. Pero nunca piensas que serás tan inútil para tu propio animal. Llevo 4 años estudiando todo lo que puede pasar y como remediarlo, y tuvo que ser algo a lo que no le han encontrado remedio.


Estoy tan harta a escuchar que no se aprende nada en la carrera, que es normal que cuando salgas seas un inútil, que se aprende todo fuera, que te llegas a plantear que coño estamos haciendo entonces aquí, partiendonos la vida y el espinazo para nada.

Pero hay que seguir.

Siempre decía que el día que faltase no podría seguir, y ya hace un año.

Hace un año fue una noche horrible; esta noche, como hace, un año tampoco hay nada que hacer.


Aunque no le veas el sentido, habrá que seguir andando, aunque sea por los que ya no pueden caminar con nosotros.