Son muchos los #estuvets que han querido unirse a nuestro proyecto, y son muchos los que han buscado otros destinos, porque un estudiante de veterinaria demuestra su valía y honra a la profesión sea donde sea y como sea.
Es una locura la cantidad de gente que ha querido hacer un voluntariado fuera de España (o dentro) este año y me siento enormemente orgullosa de poderlos haber ayudado, aunque sea un poquito.
Ahora que ya conocéis a los Rookie Vets '14, edición Nepal, os presento a Laura, una estudiante de 5º que hoy mismo se va con su petate y sola! a Samoa... SAMOA!!! como veterinaria voluntaria en la Animal Protection Society of Samoa (APS Samoa). Pero ella misma os lo puede contar...
Es una locura la cantidad de gente que ha querido hacer un voluntariado fuera de España (o dentro) este año y me siento enormemente orgullosa de poderlos haber ayudado, aunque sea un poquito.
Ahora que ya conocéis a los Rookie Vets '14, edición Nepal, os presento a Laura, una estudiante de 5º que hoy mismo se va con su petate y sola! a Samoa... SAMOA!!! como veterinaria voluntaria en la Animal Protection Society of Samoa (APS Samoa). Pero ella misma os lo puede contar...
"La idea de hacer un voluntariado
de este tipo siempre ha estado flotando en mi cabeza. Era una idea sin forma,
no sabía cómo, cuándo ni dónde; pero sabía que algún día haría algo así.
Hay muchísimas ONGs que trabajan
con animales repartidas por todo el mundo….entonces, por qué Samoa?
Pues todo empezó a coger forma un
día cualquiera, hace unos cuantos meses, hablando con una profesora de viajes
exóticos. Me habló sobre la APS y la labor que desempeñaban allí cuando ella
fue voluntaria hace unos años. Y me lo contaba con tal ilusión, que era
irremediablemente contagiosa.
Entonces se me ocurrió: “ ¿Y por
qué no hacer yo algo así?”.
Las siguientes preguntas fueron:
“Samoa, ¿y eso dónde está? ¿y ese sitio
cómo es?”. Así que lo primero que hice al llegar a casa fue buscarlo en Google.
Descubrir que era el mismísimo paraíso fue el empujoncito final que me llevó a
tomar la decisión: yo TENIA que ir allí!
Es duro organizar un viaje así
sola y en varias ocasiones he pensado “pero Laura, en qué momento se te ocurrió
meterte en este lio tan grande!!”, pero enseguida se me pasaba. Y además
contaba con la ayuda de mis compañeros que se van a Nepal y en especial de Martha, tratándome como a
una más, invitándome a las Jornadas, ayudándome con el papeleo y cediéndome
parte de los medicamentos que han recogido; gracias a ellos los perrines de
Samoa estarán un poco menos parasitados.
Y al final, por fin ha llegado el
momento y ahora estoy aquí casi sin creérmelo todavía, a punto de irme y con
más ganas que nunca de empezar la aventura de mi vida!!"
Muchísimas veces me pregunto de dónde saqué el valor para montarme en aquel avión, sola, volando a 8000km de casa. Ahora me pregunto que tipo de personas dementes se han dejado arrastrar por mí para hacer exactamente la misma locura. Y Laura? 17000km de su casa, en las Antípodas. Y os puedo asegurar que se le ilumina la cara cada vez que hablamos de su viaje.
Personas extraordinarias, valientes, a las que les mueve algo mayor que el miedo, ese algo que te hace cambiar tus prioridades y entender la vida y la Veterinaria más allá de lo que todos los demás ven y entienden.
A falta de poder montarme en un avión e ir en busca de estas experiencias, poner mi pequeño grano de arena para que los chicos vivan las suyas propias me llena de satisfacción. Estamos viviendo algo maravilloso y todos los que trabajamos con esta generación de futuros y brillantes veterinarios estamos extremadamente orgullosos de poder hacerles algo más fácil un camino duro, sacrificado, pero excepcional, que les cambiará la vida.
Feliz viaje Laura!!! Esperamos noticias tuyas, fotos y crónicas. Ten cuidado y haz que nos sintamos (más) orgullosos.