Vergüenza me da no haber escrito antes. Vergüenza de no contar todo lo que pasó por la consulta de Medicina General, todo lo que aprendí y las muchas ganas que tengo de volver a esa consulta aunque sean 15 minutos (por eso robo alguna bata en mis días libres y me meto allí, a jugar a completar puzzles de síntomas, a leer analíticas como si entre líneas escribiesen patologías y a entornar los ojos con radiografías como haría un impresionista observando un cubismo). Necesario es dar las gracias a todos los que alguna vez me han contestado una pregunta, por muy estúpida que fuese. Internos míos, echaré de menos recordaros que no os dejéis el fonendo por ahí tirado, decir que podía ser vuestra madre y que no pasa nada cuando no se saca sangre a la primera (por que no pasa nada!). Echaré de menos aprender del doctor Jordan en todos los niveles de su sabíduría y oír a Coro por el pasillo "Martha!? Me puedes auscultar un perro?"
Pero el tiempo pasa deprisa y estrenamos en Hospitalización, espectáculo continuo sin interrupción, sesiones de día y noche, hasta el 31 de Marzo, no prorrogable. Nueva temporada el 15 de Mayo...
Y se puede hacer mejor, pero no vamos mal. 12 horas y 7 días dan para mucho, para muchas preguntas, menos respuestas, muchas yugulares con las que practicar, muchas vías que poner, muchas DosisxPeso/concentración, muchos internos/clínicos/clientes y bichos. Muchas horas despierto, mucho trabajo y mucho que aprender. Menos llevamos aprendido y esperemos que sea mucho más cuando terminemos. El caso es seguir sumando.
Pero me gusta, joé. Superada la leyenda negra y el miedo, no está nada mal.
La convivencia se hace dura, pero no imposible. Todos los días muerte, recidiva, mejoría y curación vienen a vernos con su número de ficha y cubiertos de pelo. Y uno a uno nos cuenta algo nuevo y nos enseña a estar más preparados para el siguiente. Nos frotamos los ojos de cansancio, de incredulidad y, a veces, por las lágrimas. Pero es un step by step maravilloso, como creando un gradiente, un centro de gravedad que te succiona y te obliga a llamar a esa puerta y preguntar si necesitan ayuda. Porque se puede reír entre esas 4 paredes y conocer (en el más amplio significado de la palabra).
Y entre libros, libretas, PNT, seminarios inconclusos, casos clínicos y ganas de más (más todo, más dormir, más aprender, más trabajar, más casos, más difíciles, más noches, más días pasados y más por venir) os dejo con la promesa de daros buenas noticias sobre Nepal... Solo es un titular pero...
Quien querría ser un Rookie Vet en el oeste de Nepal?
Feliz semana por comenzar, cachorros.
