Pero seguimos con la llama encendida dentro, a pesar de todos los golpes y todos los vientos. No se por qué si deberíamos llorar más que reir, y preocuparnos más por comernos los apuntes que por estas gilipolleces, pero a lo mejor son cosas como estas que nacen entre los días de la más profunda desesperación, de la más perra frustración, las que nos hacen diferentes (admitamoslos, p**** cabras se nos queda cortos...) y nos hacen seguir adelante, aunque sea solo durante la siguiente hora, antes de volver a golpear la frente contra el taco de apuntes.
(gracias a todas aquellas personas que alguna vez ponen una mano en la espalda y dicen que puedes con todo)
Os presento, por si no la conocíais, cosa bastante imposible, a la Patrona de los Rookie Vets, la Santa Niña de la Curva, patrona y señora de los aprobados raspados, las prácticas en viernes, los exámenes en julio y las causas perdidas de todos aquellos jóvenes e ilusionados futuros veterinarios de espíritu fuerte y vigoroso, pisoteado y exausto.
Y esta es la historia de su nacimiento...
(momentos antes de un examen cualquiera, dos estudiantes de veterinaria hablando distendidamente histericos...)
- Ya podemos rezar para aprobar... porque si no....
- No creo en Dios... A quien le rezo? A la Niña de la Curva??!!!
Jajajajajajajajajajaja
Y así nació algo tan estúpido como esto, pero que todos con nuestra estampita de la Santa Niña de la Curva en la cartera y que tocamos y besamos antes de los exámenes... Incluso atravesando fronteras a lo largo y ancho peninsular, acogiendo en su amplio seno a desamparadados de otros campos profesionales... (palabra!)
Cosas que contarremos al final de la carrera y acordarnos entonces de que tan estúpido como eso eramos nosotros cuando nos hundíamos por tener que enfrentarnos a un papel, cuando los verdaderos problemas no están planteados en preguntas multirrespuestas...
Animo mis cachorros, el último empujón...